98.- CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES PUTA COINCIDENCIA

CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES PUTA COINCIDENCIA:

Manolo era todo un profesional. No había hierro retorcido que no pudiese enderezar. El artesano de la plana, el navito y el martillo. era capaz  de calentar y enfriar la chapa hasta llevarla a su antojo. Con la autógena era todo un artista. La eléctrica  la maquina de punto, incluso se adapto a las nuevas tecnologías  el tig, el mig, soldadura en frió y todo lo que se pusiera a su alcance.
Los malos tiempos le hicieron cerrar el taller, y allí estaba Manolo a sus cincuenta y pocos años, otra vez mendigando un puesto de trabajo. Agotado el subsidio de desempleo y la ayuda, con su curriculum bajo el brazo, y un puñado de facturas por pagar en su cabeza. ¡No se señorita, no tengo FP, ni EGB, ni ESO, ni lo otro, ni lo de mas allá!¡Pero deme un un hierro retorcido y vera!...¡Lo siento Manolo, no hay nada para usted!.

El Yernisimo, que se había casado con la Hijisima, Tenía una vida de lujo y placer a su alcance. Se reía de las desgracias ajenas en publico. Utilizaba asociaciones benéficas para engañar y enriquecerse aun mas. Carecía de carrera universitaria y no se le conocía profesión alguna. Su única habilidad era saber tocar las pelotas, tanto a los demás como así mismo. En su vida había doblado el espinazo, tanto es así que había interminables lista de espera para recibir sus riñones a estrenar, el caso es que no era donante de órganos ni de nada... Y allí estaba el Yernisimo, para ser juzgado, con la Hijisima bajo el brazo y un puñado de millones en un banco extranjero por gastar en su cabeza.